lunes, 11 de octubre de 2010

esclerenquima

El esclerénquima es uno de los dos tejidos de sostén que poseen los vegetales. Su nombre deriva de dos palabras griegas:
Comprende complejos de células que otorgan a la planta resistencia a los estiramientos,
torceduras, pesos y presiones. En algunos casos la fortaleza y elasticidad de las paredes
secundarias de ciertas células sirven como medio defensivo, ya que otorgan a la planta resistencia contra las partes bucales, garfios y ovipositores de los insectos.
Las células esclerenquimáticas se diferencian de las colenquimáticas en que poseen paredes
secundarias generalmente lignificadas y en que, cuando adultas, carecen frecuentemente de
protoplasma.

Corte transversal de tallo

Las células del esclerénquima deben sus propiedades a la
celulosa, hemicelulosas, y además hasta 30% de lignina. La lignificación se produce desde afuera hacia adentro, comienza en la laminilla media y pared primaria; la capa S3 a veces es solamente celulósica.


Se han propuesto una variedad de sistemas para la clasificación de las células
esclerenquimáticas. Aquí consideramos dos tipos básicos, que se diferencian por la forma de las células:

Las esclereidas y fibras pueden quedar asociadas a tejidos primarios o secundarios, de manera que ontogenéticamente se desarrollan a partir de diferentes
meristemas primarios derivados: procámbium, meristema fundamental e incluso la protodermis, o de los meristemas secundarios: cámbium y felógeno
esclereidas y fibras. Cuando es difícil ubicar una célula en una u otra categoría, se puede usar el término fibroesclereida
pared secundaria, que presenta
Cuando se originan durante el crecimiento primario, las células esclerenquimáticas crecen primero por crecimiento simplástico, coordinado con el de las células vecinas en división, y sin modificar los contactos celulares y las comunicaciones intercelulares. Durante este período las fibras pueden volverse multinucleadas como resultado de mitosis repetidas no acompañadas de citocinesis.
Luego las fibras, y las esclereidas ramificadas aumentan en longitud por crecimiento apical
intrusivo, los extremos se abren paso entre las células vecinas o entre los espacios intercelulares. Si los extremos son obstruidos por otras células se curvan o se bifurcan
La porción media que ya ha completado su alargamiento desarrolla paredes secundarias, pero las paredes de los extremos permanecen delgadas
La pared se forma de una sucesión de tubos que se van alargando. Las paredes secundarias son generalmente flojas y relajadas durante su formación, y se presentan a veces separadas de la pared primaria
Esquemas mostrando el crecimiento en longitud de una fibra y al mismo
tiempo el depósito de las sucesivas capas de la pared secundaria
Esclereidas

Se definen como esclereidas a las células del esclerénquima de forma muy variada,
frecuentemente cortas.
Pueden encontrarse en diferentes órganos de la planta, incorporadas a tejidos diversos, primarioso secundarios. Se las halla solitarias o agrupadas, pero nunca formando cordones como las fibras.
Los carozos de las drupas y las cubiertas de muchas semillas deben su dureza a que están
constituidos por esclereidas.


Braquiesclereidas en tallo de
Hoya carnosa, flor de nácar (Dicot

 









scleros (duro) y enchyma (sustancia o infusión). Es un tejido elástico, es decir que puede ser deformado por tensión o presión, pero retoma su forma original cuando la fuerza desaparece.

sábado, 9 de octubre de 2010

colenquima

Colénquima
El colénquima es uno de los tejidos de sostén. Es fuerte y flexible; es un tejido plástico, puede
cambiar de forma sin romperse (no recupera su forma original). Su nombre deriva del griego
que significa soldadura, con referencia a la gruesa pared de sus células.
Morfológicamente es un tejido simple, homogéneo, constituido por un solo tipo de células
Es el tejido encargado del sostén de hojas y tallos en crecimiento. En raíces aparece muy
raramente, se lo encuentra en las que están expuestas a la luz (plantas epífitas).
En órganos adultos es el tejido de sostén de partes de la planta que no desarrollan mucho
esclerénquima, como las hojas y tallos de algunas plantas herbáceas. Falta en tallos y hojas de
ciertas monocotiledóneas como las gramíneas, que desarrollan tempranamente esclerénquima.

  • Localización.
Corte transversal de tallo de


Colénquima en transcorte de hoja de
mostrando la ubicación del colénquima en la vena media
Cephalanthus glabratus, sarandí (Dicot.),














Puede aparecer en partes florales o frutos. Las cubiertas de frutos que son blandas y comestibles, por ejemplo las de las uvas, son frecuentemente colenquimatosas (Mauseth), es la porción que se come en las pasas de uva.
En la periferia del floema o xilema de los haces vasculares de tallos o pecíolos se desarrolla
muchas veces un tejido que algunos autores consideran como "parénquima colenquimatoso" por su ubicación no periférica; en los últimos textos se describe como colénquima perivascular
(Metcalfe, 1979).
En hojas que presentan movimientos násticos, como las hojas sensitivas de varias especies de



  • Estructura
prismáticas, de hasta 2 mm de longitud. En corte transversal son poligonales.


Esquema
corte transversal                                                                         corte longitudinal






El colénquima está formado por células vivas, con
protoplasto vacuolado, muy rico en agua, pueden presentar
cloroplastos y taninos, y son capaces de desdiferenciarse
para originar el felógeno o cicatrizar lesiones.










Las células del colénquima presentan paredes primarias, engrosadas, brillantes o nacaradas en cortes frescos. Las paredes están compuestas de celulosa, grandes cantidades de pectina y hemicelulosa, pero comúnmente carecen de lignina. Generalmente el engrosamiento de las
paredes celulares está distribuido desigualmente.
Observadas con microscopio electrónico las paredes muestran estratificación, hay varias capas de microfibrillas con diferente orientación y composición. Las capas ricas en compuestos pécticos presentan microfibrillas orientadas longitudinalmente y están principalmente en las porciones anchas de la pared; las capas ricas en celulosa presentan microfibrillas transversales. (Setterfield). El modo de crecimiento de esta pared primaria gruesa no está completamente aclarado: se produce mientras la célula se alarga, es decir que la pared aumenta simultáneamente en superficie y en espesor. El fenómeno es muy complejo porque los espesamientos son muy grandes.
Las células del colénquima se comunican por medio de campos primarios de puntuaciones
situados tanto en las partes delgadas como en las partes gruesas de la pared.

Clasificación.

1. Colénquima angular
en los ángulos de la célula. En los estadios iniciales, el lumen tiene forma poligonal.

  


Colénquima angular en corte transversal de hoja de
Nymphaea
(Dicot.)



2. Lamelar o laminar
tangenciales interna y externa. Ej.: tallos de
. Las células presentan engrosamientos localizados en las paredesSambucus australis (sauco), Rhamnus,
Eupatorium
.


Colénquima tangencial en
cordifolia





3. Lagunar
paredes se localizan próximos a los espacios. Ej.: pecíolos de
: las células presentan espacios intercelulares, y los espesamientos de lasMalva, Althaea, Asclepias,
Salvia
, Lactuca. Raíces aéreas de Monstera.


Colénquima lagunar en corte transversal de tallo de




4. Anular
anatomistas lo aceptan, sería el último paso en el desarrollo masivo del colénquima
angular, pues los espesamientos de las paredes celulares siguen siendo mayores en los
ángulos.

. Es el que se presenta cuando el lumen de las células es circular. No todos los
Colénquima anular en tallo de



5. Radial
subepidérmico cuyas células, cortas, presentan las paredes radiales engrosadas. Podría
ser una adaptación para facilitar la penetración de la luz al parénquima clorofiliano
(Mauseth).


Colénquima radial en Mammillaria magnimamma
: En Mammillaria magnimamma (Cactaceae, Dicot.) hay una capa de colénquima

 
Sambucus australis, sauco (Dicot.)
Lactuca sativa, lechuga
Mikania(Dicot.)
. En este tipo de colénquima el engrosamiento de la pared está localizado
La clasificación del colénquima en diferentes tipos se basa en la distribución del espesamiento de la pared.
. Las células del colénquima son generalmente alargadas, fusiformes o
Mimosa (Dicot.), el pecíolo presenta colénquima superficial excepto en la articulación, donde el colénquima está profundamente ubicado. Las paredes del colénquima son ricas en iones cloro y potasio, que son bombeados fuera del protoplasto durante la contracción celular que es la base del movimiento foliar (Mauseth). Ver el video de Mimosa (toma varios minutos descargarlo).
Mikania (Dicot.) con costillas de colénquima
Tiene generalmente posición periférica, está ubicado directamente debajo de la epidermis o está separado de ella por una o dos capas de células (Mansilla et al., 1999). En los tallos puede formar una capa continua alrededor de la circunferencia, o aparecer en cordones, a menudo en costillas exteriormente visibles. En pecíolos la distribución es similar a la encontrada en tallos. En las venas foliares mayores aparece en una o ambas caras, si está en una sola es en la inferior; también a lo largo del borde
colla,

parenquima

parenquima 



Función: El parénquima reservante almacena sustancias de reserva que se encuentran en solución o en forma de partículas sólidas.  Los sitios de la célula donde se acumulan estas sustancias son las vacuolas, los plástidos o las paredes celulares.
 

Localización: el parénquima reservante se encuentra en raíces engrosadas (zanahoria, remolacha), tallos subterráneos (tubérculo de papa, rizomas), en semillas, pulpa de frutas, médula y partes profundas del córtex de tallos aéreos.

Características funcionales:
En los tallos y raíces de especies leñosas, el protoplasma de las células permanece activo: el almidón se deposita y se remueve en relación con las fluctuaciones estacionales.
 En los órganos de reserva como tubérculos, bulbos, rizomas, las células son almacenadoras sólo una vez: el protoplasma muere después que se remueven las reservas durante el crecimiento de otros órganos.

Estructura: depende de la naturaleza de la sustancia acumulada



Almidón: se acumula en los amiloplastos, en células poliédricas, con pequeños espacios intercelulares. Ej: tubérculo de papa, rizoma de Maranta arundinacea, raíces de Manihot esculenta, cotiledones de porotos, lentejas. En el albumen de trigo, arroz, cebada, el tejido de reserva es compacto, sin espacios intercelulares.
 
Corte de tallo de Cucurbita, zapallo (Dicot.) mostrando granos de almidón en células parenquimáticas Transcorte de tallo de Hydrocotyle bonariensis (Dicot.), con granos de almidón
 




Parénquima reservante en raíz tuberosa de Manihot esculenta, mandioca (Dicot.),
con granos de almidón
(MO y MEB)


 













Glúcidos hidrosolubles:  están disueltos en el jugo celular, donde se acumulan. En las células de la médula del tallo de caña de azúcar hay glucosa y sacarosa, también en la raíz de la remolacha, Beta vulgaris y en las hojas del bulbo de cebolla, Allium cepa.  En las vacuolas del parénquima reservante de las raíces de Dahlia se acumula inulina

Polisacáridos no celulósicos: se acumulan en las paredes celulares que llegan a ser muy gruesas y a veces muy duras. Ej: endosperma de semillas de Asparagus (espárrago), Coffea arabica (café), Phoenix dactylifera (palmera datilera), Diospyros caqui.
En Phytelephas macrocarpa, palmera de América tropical, el endosperma constituye el "marfil vegetal", sustituto del marfil natural usado antes de la invención de los plásticos para confección de botones, piezas de ajedrez, fichas de póker, dados, etc. Las paredes celulares de las células endospérmicas se adelgazan durante la germinación, evidenciando que los polisacáridos son utilizados por las plántulas. 
Esquema de células del endosperma de Diospyros (Dicot.)


 Proteínas: se acumulan en las vacuolas, pueden solidificarse cuando el parénquima se deshidrata, formando un tejido compacto sin espacios intercelulares. Ej: granos de aleurona del endosperma córneo de trigo, cebada y otros cereales.

En la imagen a la izquierda se ha esquematizado una célula del endosperma córneo de la semilla de cebada, Hordeum vulgare (Monocot.) mostrando el proceso de almacenamiento de proteínas (hordeína amorfa y globulina granular) en las vacuolas. Las proteínas son sintetizadas en el retículo endoplasmático, y son transportadas a las vacuolas por los dictiosomas.



Lípidos: se acumulan en los elaioplastos o en forma de gotitas en el citoplasma. Ej: cotiledones de semillas de maní, nuez, soja; endosperma de semillas de Ricinus y Cocos nucifera; pulpa de aceitunas.  


PARENQUIMA ACUÍFERO

 

Localización: el parénquima acuífero es muy abundante en tallos y hojas de plantas suculentas. El agua acumulada constituye una reserva utilizable en períodos de sequía.

Función: es un parénquima especializado en el almacenamiento de agua.

 

Estructura: presenta células de grandes dimensiones, a menudo alargadas, con paredes delgadas, vacuolas muy desarrolladas, ricas en agua y a menudo en mucílagos, que también pueden estar en las paredes y en el citoplasma. Los mucílagos aumentan la capacidad de la célula de absorber y retener agua. Ej: hojas de Agave (Monocot.), tallos de Salicornia (Dicot.), cladodios de Cactaceae (Dicots.) y algunas epífitas. 

  


 


  

 .

martes, 5 de octubre de 2010

estructura y clasificacion de los virus

Estructura y Clasificación de los virus

Estrucutura de los virus
En los virus se distinguen las partes siguientes:
1.- Genoma vírico. Se compone de una o varias moléculas de ADN o de ARN, pero nunca los dos simultaneamente, Se trata de una sola cadena, abierta o circular, monocatenaria o bicatenaria. .
2.- Cápsida. Es la cubierta proteica que envuelve al genoma vírico. Está formada por proteínas globulares o capsómeros que se disponen de una manera regular y simétrica, lo que determina la existencia de varios tipos de cápsidas: icosaédricas, helicoidales y complejas.
La función de la cápsida es proteger el genoma vírico y, en los virus carentes de membrana, el reconocimiento de los receptores de membrana de las células a las que el virus parasita.
3.-Envoltura membranosa. Formada por una doble capa de lípidos que procede de las células parasitadas y por glucoproteínas incluidas en ella cuya síntesis está controlada por el genoma vírico. Las glucoproteínas sobresalen ligeramente de la envoltura y tienen como función el reconocimiento de la célula huesped y la inducción de la penetración del virus en ella mediante fagocitosis.
ESTRUCTURA VIRAL
Los virus están constituidos por macromoléculas, las cuales se organizan de tal manera que le confieren sus propiedades biológicas y físico-químicas. Estos componentes moleculares son los siguientes:
- Acido nucleico: DNA o RNA.
- Proteínas.
- Lípidos.
- Hidratos de carbono.
Estos componentes se organizan constituyendo las partículas virales.
El conjunto de ácido nucleico y proteínas es altamente organizado y recibe el nombre de nucleocápsula. Esta estructura se ordena de acuerdo a ciertas simetrías, adoptando las siguientes formas:
a) Icosaedro: consiste en un poliedro regular de 20 caras planas triangulares. b) Helicoide: la organización corresponde a una estructura en espiral o hélice. c) Compleja: en este tipo de nucelocápsula no hay una simetría regular.
La estructura de la nucleocápsula le confiere a las partículas virales diversas propiedades, como estabilidad termodinámica y capacidad de almacenar un máximo de masa en el menor volumen. La organización física de los virus como partículas se denomina virión, que corresponde a la particula viral completa extracelular. Las proteínas virales se agrupan en unidades estructurales llamadas protómeros. Estas unidades estructurales, que pueden estar formadas por una o varias proteínas, se ordenan entre sí para formar los capsómeros que corresponden a las unidades morfológicas observadas por microscopía electrónica que integran la nucleocápsula.
Algunos virus poseen lípidos e hidratos de carbono que se organizan en bicapas de lípidos con glicoproteínas insertas, en la misma organización que las membranas celulares.
 La clasificación de los virus ha sido y sigue siendo un punto extremadamente confuso y sometido a constante revisión. No hay que olvidar que para su identificación y nomenclatura no son válidos los criterios utilizados con los organismos de estructura celular eucariótica, ni siquiera los seguidos en el caso de las bacterias. En virología no hay unanimidad acerca del concepto de especie, ya que los criterios a seguir para definirla pueden variar de una familia de virus a otra.
Los conceptos de familia y género se utilizan ya en el I informe del Comité internacional de Taxonomía de Virus de 1971, pero, muy a menudo, la insuficiencia de datos disponibles para la creación de una familia obliga a la utilización provisional del concepto grupo para su agrupación.
En la actualidad, para la clasificación de los virus se valora:
La naturaleza (ARN/ADN) de su genoma: si el ácido nucleico es de tipo monocatenario o bicatenario, si se dispone en una sola molécula o fragmentado, su peso molecular, estrategia de replicación, lugar de la célula huésped en que la realiza y en donde se ensambla el ácido nucleico vírico con los componentes de la cápside (núcleo/citoplasma).
Tamaño y morfología: características de la cápside; número y disposición de los capsómeros (simetría cúbica/helicoidal); si la nucleocápside aparece desnuda o envuelta; si es envuelto, lugar de su adquisición y presencia o no de espículas; caso de existir éstas, su tipo y composición antigénica.
La presencia de enzimas específicas, en especial ARN y ADN polimerasas que intervienen en la replicación del genoma, y la neuraminidasa necesaria para la liberación de ciertas partículas virales (influenza) de las células en las cuales se formaron.
La sensibilidad o resistencia al éter y a otros solventes orgánicos.
Tamaño y forma del virión.
Características antigénicas (muy utilizadas para el establecimiento de tipos dentro de las especies).
Métodos naturales de transmisión.
Huésped, tejido y tropismos celulares.
Anatomopatología, incluyendo la formación de cuerpos de inclusión.
Sintomatología.
Algunos virus que contienen ADN: Parvovirus, Papovavirus, Adenovirus, Herpesvirus, Poxvirus, HepaADNvirus
Algunos virus que contienen ARN: Picornavirus, Calicivirus, Reovirus, Arbovirus, Togavirus, Flavivirus, Arenavirus, Coronavirus, Retrovirus, Bunyavirus, Ortomixovirus, Paramixovirus, Rabdovirus
Clasificacion según la sintomatologia
La clasificación más antigua de los virus está basada en las enfermedades que producen y este sistema ofrece algunas ventajas para el clínico. Sin embargo, no es satisfactorio para el biólogo, ya que el mismo virus puede aparecer en varios grupos, porque produce más de una enfermedad dependiendo del órgano que sea atacado.
Enfermedades generalizadas: Son aquéllas donde el virus se disemina en el cuerpo a través de la sangre afectando a múltiples órganos. Pueden ocurrir erupciones cutáneas.
Enfermedades que principalmente afectan órganos específicos: El virus puede llegar al órgano por medio de la sangre, siguiendo los nervios periféricos u otras vías.

Clasificacion por sus propiedades biologicas quimicas y fisicas
Se puede separar claramente a los virus en grupos principales llamados familias, en base al tipo de genoma de ácido nucleico y al tamaño, forma, subestructura y modo de replicación de la partícula viral. Dentro de cada familia las subdivisiones, que se llaman géneros, suelen basarse en diferencias fisicoquímicas o serológicas.
Los viroides
Son pequeños agentes infecciosos que causan enfermedades a plantas, pero no se ajustan a la definición de los virus clásicos. Son moléculas de ácido nucleico (PM 70.000 a 120.000) sin una cubierta proteínica. Tienen moléculas de ARN circular de tira sencilla, unidos en forma covalente que contienen aproximadamente 360 nucleótidos y constan de una estructura de pares de bases que semejan un bastón con propiedades únicas. Se ordenan en 26 segmentos de doble tira separados por 25 regiones de bases no apareadas incorporadas en asas inteARNs de tira sencilla; hay un asa en cada extremo de la molécula en forma de bastón.
Estas características dan a la molécula del ARN viroide propiedades estructurales, termodinámicas y cinéticas muy similares al de aquéllos de molécula de ADN de doble tira del mismo peso molecular y contenido de guanina más citosina (G+C). Los viroides se replican por un mecanismo sumamente original en el cual las moléculas de ARN viroide infectantes son copiadas por la enzima del huésped que normalmente es responsable de la síntesis de los precursores nucleares para el ARNm. No se ha mostrado que el ARN viroide codifique algún producto proteínico; las enfermedades devastadoras de las plantas, inducidas por viroides, ocurren por un mecanismo desconocido. Hasta hoy se han identificado viroides en plantas; no se ha demostrado que existan en animales o en el hombre.


domingo, 3 de octubre de 2010

virus

Los virus

virus son un reino de parásitos intracelulares obligatorios, de pequeño tamaño, de 20 a 500 milimicras, constituidos sólo por dos tipos de moléculas: un ácido nucleico y varias proteínas. El ácido nucleico, que puede ser ADN o ARN, según los tipos de virus, está envuelto por una cubierta de simetría regular de proteína, denominada cápside.
      Los huéspedes que ocupan pueden ser animales, vegetales o bacterias. Entre los microorganismos, los virus parasitan bacterias, son los bacteriófagos o fagos, pero no se conocen virus que infecten algas, hongos o protozoos. Entre los vegetales, sólo se han encontrado infecciones por virus en las plantas con flores, pero no en las plantas inferiores. Entre los animales, se conocen muchos que parasitan vertebrados, pero entre los invertebrados, sólo se han encontrado en artrópodos.
      
      Los virus más conocidos de todos son los fagos, debido a la gran facilidad técnica del cultivo de bacterias, comparado con el cultivo de tejidos o embriones. Su ciclo vital es el siguiente: la partícula del fago se fija en determinados puntos de la pared de la bacteria y la molécula de ácido nucleico, junto con algunas proteínas enzimáticas, es inyectada dentro de la bacteria y queda fuera la cápsula proteica vacía. Después de esta penetración, la célula infectada deja de producir sus proteínas y se pone a fabricar las del fago, que, de ese modo, va haciendo copias de su ácido nucleico y de las subunidades proteicas de la cápsula, que se reúnen para constituir las partículas completas; cuando éstas se han acumulado en un cierto número, la bacteria se rompe y libera los virus, que van a infectar las células próximas.
      Se ha discutido mucho si los virus son o no seres vivos. Por una parte se reproducen, aunque dependientes de la célula de la que utilizan enzimas y ribosomas; no metabolizan substancias para producir energía, y sólo tienen un tipo de ácido nucleico, ADN o ARN; además son cristalizables. Posiblemente, sistemas parecidos a los virus, pero de vida libre, fueron los primeros seres vivos.
      Los hechos más sobresalientes que han motivado el rápido desarrollo de la virología, la parte de la microbiología que tiene por objeto el desarrollo de los virus, son: en la última década del siglo pasado, Ivanovsky primeramente y después Beijerinck descubrieron la existencia de agentes infectivos, más pequeños que las bacterias hasta entonces conocidas, a los que hoy se denominan virus; en el año 1.931, Elford consiguió medir las dimensiones de los virus; Roux hizo el primer intento de cultivo de virus; y Goodpasture lo obtuvo en huevos fecundados, es, decir, con embrión de pollo; Max Theiler consiguió la primera vacuna contra la fiebre amarilla del mono, practicando inoculaciones sucesivas de su virus en ratones y cultivando después el producto en embriones de pollo, y, encontrado en el camino, se han preparado otras vacunas contra el cólera porcino, el moquillo y la rabia del perro, etc.; en 1.935, Stanley cristalizó el virus del mosaico del tabaco; Williams fotografió por primera vez un virus, por medio del microscopio electrónico; en 1.949, Enders, Robinson y Willer cultivaron el virus poliomielítico; Coons demostró la situación de las partículas víricas en las diferentes partes de la célula, mediando la técnica de los anticuerpos fluorescentes; Fraenkel-Conrat y Williams fraccionaron el virus en una parte proteica y en ácido nucleico y demostraron que, separadamente, no poseen infectividad; y Gierer y Scharamm pusieron de manifiesto que la infectividad de ciertos virus es debida al ácido nucleico. En el año 1.957, Isaacs descubrió el interferón.
      Los virus, aparte de su importancia como agentes patógenos, tienen un gran interés en biología molecular, para el estudio de ácidos nucleicos, ya que de ellos se pueden extraer en gran cantidad y pureza. Por último, es de esperar que por medio de las técnicas investigadoras actuales se alcancen, en un futuro próximo, descubrimientos de trascendental importancia para el conocimiento de los virus y la manera de combatirlos.
      Según su forma, se distinguen los siguientes tipos de virus: icosaédricos, como el virus de la poliomielitis; helicoidales, como el virus del mosaico del tabaco; bacteriófagos, que sólo infectan a las células bacterianas; y virus con envoltura, como el de la viruela, el del sida o el de la gripe. Los icosaédricos, como dice su nombre, tienen forma de un icosaedro. Los helicoidales son de forma cilíndrica. Los bacteriófagos son el nombre particular de ciertos virus que transportan una partícula genética de una célula bacteriana a otra. Descubiertos por D'Herelle en 1.915, se obtienen mediando filtración; son específicos, es decir, que cada uno ataca solamente a una especie de bacterias; de cabeza poliédrica con ácido desoxirribonucleico en su interior, y cola anular, o bien en forma de esférula o de bastón, con una placa basal, espinas y fibras en la parte inferior. Su importancia ha decrecido con el descubrimiento de las sulfamidas y de los antibióticos. Los virus con envoltura son más o menos esféricos.